20/1/13

Rosas



Abro los ojos, la luz me lastima y cierro bruscamente, tallo mis ojos para que poco a poco pueda ver.
Dejando a un lado la vista, noto que mi cuerpo esta caliente por los rayos del sol, las ramas de un árbol evitan que lleguen directamente a mis ojos, sus hojas son de un verde claro y brilloso.
No puedo apartar la vista, hasta que un graznido me hace tomar conciencia de donde estaba.
Era sin duda uno de los lugares más hermosos que allá podido ver, todo era verde, con flores abiertas y bellos colores, podía oír el caminar de varios animales, el arrollo, el aleteo de las aves.
Una pequeña ave poso en la rama que mire, no lo podía distinguir muy bien pero era hermoso, pronto empezó a cantar, cerré mis ojos, algo hizo cosquillas en mis brazos, olía dulce.
Con la mano tome algo que parecía estar en montones.
Ro...rosas blan...cas.
Me levante por primera vez desde que desperté, estaba en un ataúd. Tenía montones de rosas blancas.
Alguien grito mi nombre, pero...
Se escuchaba como corría y caía, también como se levantaba, cada vez se podía oír más su respiración agitada.
Algo de entre las rosas galo de mi, quise gritar pero una de las rosas callo en mis labios, me hundía entre ellas, otro par callo en mis ojos, ya no podía ver.
Antes de caer en total oscuridad, escuche como gritabas mi nombre, y sentí por ultima vez calor, cuando tu mano toco mis mejillas.
El  ave grazno, y deje de sentir cualquier cosa.
 

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